miércoles, 14 de diciembre de 2011

Ser Feliz, Receta

Hoy escuchaba en la radio una publicidad que decía “No existe una receta para ser feliz”.

Si pensamos un poco la frase sin incluir el contenido publicitario que la acompañaba podemos creer en primer momento que es una gran verdad.

La realidad es que es una verdad a media ya que si bien no existe una receta para ser feliz sino una por cada personal que lo desee realmente, es decir habría una receta por cada individuo aunque muchas en varios aspectos se parezcan.

Lo que siento al respecto es que SI hay una receta para ser feliz !!!

Esta receta es "buscar por todos los medios SER uno mismo, identificarse con uno. Revisar que somos y ver si coincide con lo que queremos ser y luego de esto ver que cosas no eran y buscar los caminos para conseguirlas".

No hablo respecto a que tenemos, a como es nuestro trabajo, nuestra pareja… no, nada que ver con eso… hablo respecto a como nos sentimos con nuestro trabajo, con nuestra pareja, con nuestros amigos, con la familia, los hijos, los padres… pero principalmente

CON NOSOTROS MISMOS

De aquí parte la receta para ser feliz, de que tanto coincide lo que deseamos ser con lo que en realidad somos.

Cuanto más se parezca una cosa con la otra nuestra “satisfacción con nosotros mismos será mas completa será” y esto, sin duda alguna, hará que nuestro vínculo con los otros sea más integro, más directo, más auténtico, más honesto.

Todo esto provoca que todos los otros tengan buenas sensaciones y sentimientos hacia nosotros y eso alimentará nuestra sensación de plenitud y lo que llamamos “felicidad” dirá presente en nuestra vida.

Esta es mi receta para alcanzar la felicidad… “Es la búsqueda permanente de la coincidencia entre lo que somos y lo que deseamos ser y actuar para que se parezcan lo máximo posible” sin entran en la desesperación por conseguirlo YA.

Esto último empaña y casi diría que anula la búsqueda porque el stress que genera la presión de lo instantáneo diluye el objetivo que deseamos alcanzar.

Así que si quieres ser feliz, aquí tienes una receta.

Si la sigues al pie de la letra, tendrás buenos resultados en un tiempo dependiendo de que tan lejos este tu hoy de lo que deseas para ti… y de que tanto empeño pongas en acercarlos.

Después de algún tiempo, con algo de experiencia en preguntarte y responderte con verdad (sin auto-engañarte, cosa muy habitual en nosotros) podrás agregarle matices personales a la receta y hacerla tuya.

No pongas en los otros la razón de tus frustraciones, esa razón está en ti y sólo tu puedes cambiarlo.


La vida es bella siempre, aun en circunstancias aparentemente adversas.


Inténtalo, prueba, sigue buscando, transita el camino y disfrútalo… está bueno!!!

martes, 13 de diciembre de 2011

Fin de año, ¿Cómo nos encuentra?

Todos los años pasa lo mismo… llega el final del año y siempre nos hacemos las mismas preguntas

¿Qué nos pasó?
¿Qué intentamos hacer?
¿Alcanzamos nuestras metas?
¿En nuestro trabajo? ¿En nuestra familia? ¿En nuestra pareja?

Decenas, cientos de preguntas!!! Y muchas sin respuesta.

Esto es lo peor ya que estas preguntas sin respuesta nos dejan un vacío muy difícil de llenar.

También encontramos muchas respuestas que no nos gustan porque fueron fracasos o dicho de otra manera bastante menos doliente… hechos que no salieron como nos hubiese gustado o que no cumplieron todas nuestras expectativas.

También pasa que nos embarcamos en algunos nuevos proyectos… de trabajo… “emprendimientos”… o de pareja…”trajimos a nuestra pareja a vivir con nosotros”…

Y, aunque parezca mentira… muchas veces estas cosas no fueron todo lo que esperábamos, no fueron todo lo que proyectamos en eso… puede ser que el “emprendimiento” se demora más de lo previsto en arrancar, en comenzar a dar frutos que completen los ingresos que pensábamos… o esa pareja que entró en casa, luego de un tiempo no fue todo lo esperado y su presencia ya no es tan esperada… tan deseada como cuando se tomó la decisión y en estos caso dar marcha atrás es muy complicado…

Que hacemos cuando no conseguimos acomodar nuestro ego al ego invitado… o que hacemos cuando no conseguimos encontrar la tranquilidad en esos momentos que necesitamos estar solos (con nosotros mismos) y siempre está esa figura que no podemos evitar aunque sea por todo un día y su noche.

El stress que estas situaciones y otras hace que muchas veces perdamos el control, que nuestros nervios nos jueguen una mala pasada lastimando a quienes no tienen que ver en la cosa e incluso, ponemos en otros la responsabilidad de lo que nos pasa porque nos negamos a ver lo evidente.

¿Cómo se hace para evitar o reducir estas situaciones tan odiosas y peligrosas?

Tenemos que encontrar un grupo de contención y conseguir hallar la manera de recuperar nuestro eje para no perder el equilibrio.

No es fácil y requiere de un trabajo muy profundo de autoconocimiento y control de uno mismo… en beneficio de uno, en principio y en el de los que están relacionados con nosotros.

jueves, 8 de diciembre de 2011

Hacer que los sueños sean...

La mayor parte de un sueño se basa en lo que hacemos por él y no en lo que decimos de él.

La ansiedad nos lleva desear que todo suceda YA, como por arte de magia… en un abrir y cerrar de ojos!!!

El ímpetu es apasionante, como en todo comienzo, pero es que en esa fuerza corremos el riesgo de atropellarnos. Las metas necesitan de dos cosas fundamentales: objetivos claros y paciencia.

Para cumplir un sueño, deberemos saber que tendremos que esforzarnos si es que en realidad queremos alcanzarlo y el sacrificio será presente.

Hoy día casi todo es instantáneo… estamos acostumbrados a la “ley del mínimo esfuerzo”… y la cultura de lo instantáneo nos hace creer que es posible lograr metas a corto plazo, pero no siempre sucede.

Esto de pretender todo YA nos lleva a que la tolerancia a la frustración sea escasa y cuando se nos atraviese el mínimo problema tenderemos a abandonar los objetivos y el sueño que proyectamos quedará como un mal recuerdo.

Esto le sucede a muchos y en estos tiempos casi no hay proyección a planes de largo plazo.

Todos somos, en America, hijos de grandes soñadores. En su gran mayoria, Europeos que decidieron cruzar el Atlántico en busca de un sueño.

Ellos soñaron a principio de 1900 y con su cultura al trabajo de manera incansable y de a poco, con gran sacrificio y mucha dedicación trazaron su camino hasta alcanzar su sueño.

Muchos de aquellos soñadores vinieron a “hacer la América”, es decir… a ahorrar dinero para regresar a sus países de origen y comenzar de nuevo, pero eso no fue porque esos soñadores cambiaron sus objetivos y metas. En vez de ellos regresar, trajeron a sus familias porque vieron que aquí estaba todo por hacer.

Ese ímpetu hizo grande a este continente y creció junto a esos soñadores.

Hoy pasa que muchos valores e instituciones están en crisis y es por eso que los proyectos, las metas o los sueños queramos lograrlos de un día para el otro, sin experimentar la búsqueda, el camino, los aciertos y los fracasos que implica poder obtener alguna aspiración.

¿Cuáles son algunos de los valores que faltan en esto de pensar en el resultado sin tener él cuenta el proceso?
Uno de ellos es el compromiso.
La responsabilidad es fundamental para lograr una meta: no ser contradictorio entre lo que se dice y se hace, ni con uno mismo ni con las personas involucradas. Hay que tratar de ser ordenado en los objetivos y el principal involucrado en la meta tiene que demostrar su esfuerzo trabajando igual o más que sus compañeros.

Otro valor que escasea es el sacrificio.

Todos podemos ser ingeniosos y tener excelentes ideas, pero lo más admirable es saber llevarlas adelante.
Muchas personas sueñan enormes sueños pero frente al gran trabajo que significa hacerlo realidad dejan al sueño en eso… en un sueño y quedan frustrados. Se quedaron en palabras!

Ser creativo es sólo una parte de la tarea. El 90 por ciento de un sueño se basa en lo que hacemos por él y no en lo que decimos del mismo… se basa en que tanto trabajamos por él.

Conseguir recuperar los valores perdidos es el primer paso para pensar un sueño.

El ser y el hacer son inseparables para poder lograr nuestros sueños, metas, objetivos, planes o como queramos llamarles.

Proyectar a largo plazo y la cultura del trabajo será la mejor forma que aquellas ideas se conviertan en realidad.

Es claro que uno puede proyectar a largo plazo… pero de la mano a esto van junto unos cuantas metas más cortas que enlazan nuestro presente con ese futuro soñado.

Los ideales se concretan haciendo.

jueves, 13 de octubre de 2011

Los sueños

Que son los sueños?... Son imagenes que reproduce nuestro cerebro mientras dormimos, es decir, mientras nuestro conciente no está activo.


Son expresiones de nuestros deseos más profundos, algunos conocidos y la mayoria desconocidos.


Algunas veces los sueños aprarecen condicionados por lo vivido en el día sea en persona o por alguna imagen en TV o en el cine... otras veces los sueños simplemente... aparecen.


En nosotros no sólo existen estos sueños sino que tenemos otro tipo de sueños. Estos son nuestros anhelos... son las cosas que deseamos para nosotros y para todos los seres que estan en nuestro corazón.

Tambien, Aristóteles menciona a los sueños diciendo que la esperanza es el sueño de quienes están despiertos.

Nuestro inconciente suele disfrazar de "sueños" a nuestras metas "imposibles", o dicho de otra manera, esas metas que nos parecen muy difíciles de lograr... disfrazadas de sueños... es que muchas veces, de a poco, las alcanzamos.

Los sueños son el motor de la humanidad toda, de cada ser sobre esta tierra. Los sueños nos mantienen vivos y hacen de nosotros seres únicos y poderosos.

Cada logro, cada descubrimiento fue el resultado de un soñador... de un hombre que anhelaba algo... y asi estamos... soñando, creciendo... y volando hacia un futuro lleno de interrogantes que nos desvelan... y soñamos despiertos y la esperanza se hace presente y nuestros corazones se llenan de luz.

Y las pesadillas? Tambien son sueños... y de los feos... que nos despiertan sobresaltados!!!

Las pesadillas no son malos sueños, son los sueños que nos hacen superar el miedo... a lo desconocido y nos convierte en superhéroes de nosotros mismos enseñandonos a superar y a hacer frente a lo que nos hace temer.

Los sueños que llamamos pesadillas son los que nos enseñan a perseverar y no importa que tan horribles sean y cuantas veces se presenten mientras dormimos... Los vencemos!!! Tal es así que desaparecen y no vuelven...

Las pesadillas aparecen cuando perdemos nuestra seguridad en nosotros, cuando se abren "fisuras" en nuestra integridad como personas.

Si miramos dentro y nos preguntamos ¿que nos pasa?... en algún momento encontraremos la respuesta y los miedos generados por las pesadillas desaparecen y otros nosotros seremos porque nos hemos encontrado.

jueves, 6 de octubre de 2011

El amor a los 40...a los 50´s

No podría afirmar nada con sustento estadístico, sino de la propia experiencia de mi hacer o de lo que veo y siento de quienes son cercanos.

El amor comienza verdaderamente desde la caída de los prejuicios... desde que todos los "supuestos" sociales se caen.

El amor comienza desde el mismo momento en que el hombre deja de serlo... para comenzar a ser parte del otro y sabe mantener su individualidad. El amor comienza cuando la mujer se olvida de la lucha de géneros y comprende en que ese hombre es su varón y parte de ella, sin olvidar que ella también es "ella", un ser único.

Caídos todos los supuestos (fijados en nuestra mente), asume el trono nuestro corazón y desde ese momento... nace el reino del amor incondicional en donde la entrega pasa a ser total... no hay canje... ni estrategias... ni especulación...

Sólo se trata de disfrutar la plenitud del encuentro entre un hombre y una mujer.

De jóvenes, a los 20, a los 30... el amor era como una disputa... desde que yo te quiero mas... o nadie te querrá como yo... y desde mantener el control sobre el otro... o desde el "hacerlo a nuestra medida"... es como una competencia a ver quien cambia a quien... ¿quien gana?

Nadie gana en esta "pulseada"... excepto que la tolerancia les de espacio a que el amor llegue y nadie buscará fuera lo que está durmiendo con uno... cada noche.

Se dice que después de los 40... los hombres son más cariñosos... y las mujeres más sexuales...

¿porque será?

Será que eso de ser cariñoso unos años antes era poco "masculino"... o eso de ser sexual en las mujeres no era bien "visto"...

Es posible... a ciencia cierta NO LO SE... pero prefiero suponer que es porque uno aprende a ser uno y comienza a hacer lo que le gusta...

Imaginemos como puede ser una relación con un hombre cariñoso con una mujer sexual...

Podría se realmente explosiva... Si sabemos que el cariño hacia una mujer la enciende y cuando una mujer se enciende se abre un espacio enorme para el amor de todo tipo la conexión pasa a ser sublime.

¿Y que es el cariño?

El cariño es el respeto, el buen trato, la cortesía... es ser generoso, amable, considerado... es ser "amoroso"...

Todas estas cosas son las llaves a las puertas de una vida diferente, sin luchas, sin disputas "territoriales" en donde el lugar de cada uno es el lugar del otro... sin dejar espacio a lo individual y manteniéndolo a cada lugar como si fuese único. ¿no me explico?

Podría decir... trata de sentir como sería que todos los espacios son de los dos pero de la misma manera los sientes propios... con el sentimiento de que "haz ganado" y sin el sentimiento de la "pérdida" de los espacios antes considerados propios...

Antes se decía que el trabajo era el "espacio" del hombre (proveedor del hogar) y que la casa era el espacio de la mujer... Hoy es diferente y está todo mezclado pero en el hombre suele haber cierto sentir de "perdida" por la inclusión el en mundo laboral de la mujer... y en la mujer suele haber cierta "resistencia" a compartir la casa con ese hombre... o bien decir... La cocina, lugar muchas veces "el bastión" que las mujeres nunca cederán a su hombre...

O será que nunca lo compartieron... ¿probaste el juego de la cocina juntos?...

En realidad, lo que hay que tratar de experimentar a diario... es EL JUEGO... jugar con todo...

... dejar espacio a eso nos llevará a una relación diferente y mucho más rica y unida.

miércoles, 21 de septiembre de 2011

El amor a los ´50: Confianza y espontaneidad

Hace un tiempo revisé el tema del amor después de los 40… pero hoy me encuentro casi en mis 50 y estoy en pareja… y me pregunto… ¿y ahora que? ¿Cómo será?...



Todo el mundo siempre dice que para el amor no hay edad y que el amor derriba todas las barreras como las culturales, las que pone la diferencia de edad, las clases sociales, etc.



Esto es en gran parte porque es frecuente cada vez más que gran cantidad de hombres y mujeres en la actualidad, afianzaron una pareja después de un divorcio, convivencia o bien, han encontrado una compañera después que la experiencia ha llegado.



En nuestros comienzos amorosos la pérdida de un amor era casi fatal… después de eso… el abismo!



Hoy, y cerca de la madurez que nos dan los años, enamorarse es un acto que se puede vivir en plenitud, sin límites o sin los prejuicios o idealizaciones que hubo en otras etapas de la vida.



Esto sucede porque el amor NO es igual. ¿Cómo? Si, no es igual aunque si lo es en su esencia.


Y, ¿cuáles son las diferencias sustanciales entres los amores de juventud o las relaciones que se establecen promediando los ´30 y las que llegan a los 40 o después de los ´50?



El amor y las relaciones en sí son diferentes en cada década de nuestras vidas y van de la mano de cómo vivimos… de nuestros entornos y de nuestra evolución emocional que va marcando nuestras diferentes etapas.



Cada uno puede revisar como fueron sus amores a lo largo de su crecimiento personal y ver sus diferencias.



El amor a los 15… en donde todo es novedad… con una revolución hormonal de magnitud casi incontrolable… mezclada con la capacidad de hacer… con la independencia recién adquirida o en lucha por conseguirla… a los 20… con alguna experiencia en el haber y algún fracaso… y ya en la independencia casi completa con los padres… ya trabajando o cursando estudios superiores… Y se vienen los 30… en donde se busca dar un salto y es la concreción de años de pareja y se da la convivencia y quizás los hijos… formar una familia.



Ya a los 40, podemos encontrarnos en familia… con los chicos creciendo… o talvez divorciados y con un mundo que cambió y nos muestra que no conocemos los nuevos códigos de comunicación… ¿Cómo era ese tema de la conquista del otro?... ¿A dónde voy? Talvez los After office… o reuniones de amigos… o alguna página de “citas”… Otra vez, casi como en la adolescencia… prueba y error… mucha búsqueda… muchas opciones… pero no sabemos que queremos… y ya estamos algo rígidos… y al otro le sucede igual… y la posibilidad de conocerse se reduce o extingue… y aparece una frase común cuando no encontramos lo que buscamos:



“Ya no hay hombres” o “Ya no hay mujeres”



Y no es así… hay y de sobra! Lo que sucede es que buscamos tan específicamente ese compañera/o que es casi imposible encontrarlo… salvo que suceda un milagro.



En esta búsqueda buscamos “que no sea como las experiencias anteriores”… que no sea… que no tenga… que no a esto, que no a lo otro… y así transitamos un camino que nos conduce sólo a frustraciones.



Sólo si aprendemos de esto será que cambiaremos nuestro presente y es cuando comenzarán a aparecer nuevas opciones y es allí que volveremos a comenzar de cero… y la posibilidad de encontrar alguien importante aumenta… y mucho. Es porque nos hemos abierto!


'El amor a los 50 años es, definitivamente, especial.


Alguien de 50 ó 60, se ha divorciado una, dos y hasta tres veces!!! Claro que una separación no es sinónimo de fracaso o de falla sino que puede ser todo lo contrario: Cambiar varias parejas creo es más saludable definirlo como la suma de aprendizajes que como fracasos y aunque no todos aprendamos igual, después de los 50 aumentan las posibilidades de que cada persona se conozca mejor y sepa que quiere y necesita.


A los 50, nuestras expectativas sobre el otro dejan de ser tan ideales para convertirse en reales.


Es así que se generan las condiciones para un amor maduro. Y es porque se han atravesado etapas de frustraciones, crisis, pérdidas, rupturas y conflictos y cada una de ellas ha dejado una enseñanza, ¡y la hemos aprendido!


Un amor maduro se despega de la ilusión de que el otro sea como uno quiere y acepta la realidad de que la otra persona es como es y aprendemos a amarla de esa manera y sin el propósito “hacerla” a nuestra medida.


En el amor a los ´50 ya no hay especulaciones, se tiende a vivir de manera espontánea y sin presiones con uno y con la pareja. La tensión cede frente lo autentico y el otro puede aceptarnos y querernos sin tener que ser quien no es para agradarnos.


En esta etapa es marcada por la confianza. Las escenas de celos, ya no son el modo para comunicarse con el otro.


A los ´50 el vínculo deja atrás a las estrategias para llamar la atención. Las parejas son más independientes y cada integrante tiene una vida individual plena y que la comparte con la de su pareja enriqueciéndose ambos. Es la única forma en que pueden funcionar. Nadie más o menos equilibrado tolera a otro que le demande presencia las 24 horas o que se le cuelgue como si de eso dependiera su propia existencia.


Esto genera mayor confianza y autenticidad, entonces ¿Que problemas podrá afrontar un hombre o mujer con una nueva pareja alrededor de los ´50?


El problema puede aparecer si la pareja no solucionó conflictos previos y arrastra su pasado.


Cuando esto pasa la convivencia no se desea y la propuesta pasa a ser Tu casa, mi casa… pero nunca se habla de Nuestra casa… la casa es un lugar para vivir… Nuestra casa es un lugar para crecer, y de esto último se trata en una relación… CRECER. Lo otro es “flotar”.


Después de los 50 se puede retomar la convivencia, pero es importante haber resuelto frustraciones anteriores.


Aprender de las experiencias previas, ser auténticos, afianzar los lazos de confianza y compartir, sin egos en juego, parecen ser las características que definen el amor en la mediana edad. Sin el fatalismo de la adolescencia y con la madurez de haber vivido, después de los ´50 el amor cumple la mayoría de edad y se hace más real.


Allí puede suceder que esa pareja tenga hijos emancipados o niños aún… en el primer caso se dará resolver las cosas de la pareja en sí y aprender a crecer en ese camino. Con niños pequeños… en edad escolar… la cosa cambia y puede tomar vuelo casi de una familia tipo… pero con la madurez del amor a los ´50. La crianza bajo un mismo techo, con el ejemplo diario de la convivencia y el mostrar que, a pesar de la diferencia y puntos de vista diferentes, es posible ir a dormir con un beso o despertar en el amor… y no en el enojo con el otro por desavenencias circunstanciales… ¿y si esas desavenencias no son circunstanciales?... Si hay amor y respeto por el otro..todo es circunstancial ya que lo primario es el amor.



Texto de base de: Eugenia Plano

martes, 30 de agosto de 2011

El amor a los hijos

Hoy leí en el Fbook... no se si una declaracion de amor o una declaracion de guerra.

Decia así... "PROMESA A MI HIJO... No soy tu amiga, soy tu mamá. Te acosaré, me enojaré con VOS, te sermonearé, te volveré loco, seré tu peor pesadilla y te seguiré cuando sea necesario porque TE AMO!!! Cuando tu puedas comprender eso sabré que eres un adulto responsable. NUNCA encontrarás a alguien que ama, reza, se preocupa y a quien le importes mas que a mí!!....Ponlo en tu muro si eres mamá"

En primer lugar no lo puse en mi "muro" porque soy papá y en segundo lugar me resultó chocante.

Está muy bien marcar el hecho de que uno es mamá/papá y no amiga/amigo de los hijos porque permite mantener cierta "distancia" que es muy importante cuando uno educa en todo lo que significa esa palabra.
El resto del mensaje ya no entra en lo que yo siento como básico para educar a mi hija.

Acosar, enojar, sermonear, volver loco, ser la peor pesadilla, perseguir... es algo realmente fuera de toda mi lógica. Casi diría que es todo lo opuesto a lo que yo entiendo como amor por un hijo.

Para mi amar a un hijo no es todo esto que se expresó más arriba sino que es intentar enseñar con nuestro ejemplo de vida como es vivir.

Amar a un hijo es enseñarle que la verdad, la honestidad, la caridad, el autoestima, la cordialidad, la humildad, el buen corazón... son los valores que rigen la buena vida.

Amar a un hijo no significa esforzarnos hasta el cansancio para que crezca entre algodones tratando de evitar se lastime.

Para mi amar a un hijo es hablar de igual a igual dentro de lo que su evolución lo permita sin subestimarlo, sin faltarle el respeto y haciendo él sienta la confianza necesaria para expresarse con nosotros libremente, sin temor al reproche o castigo sino desde el convencimiento que encontrará una respuesta.

Amar a un hijo significa enseñarle todo lo necesario para que pueda desarrollarse y arresgarse en la gran aventura de crecer dejandolo "sólo" pero sin perderlo de vista... manteniendo una distancia prudente, observando pero dando libertad para que ese hijo gane confianza en si mismo y sepa que alli estamos atentos para su llamado si asi lo quiere.

Este amor para un hijo es más protector que el otro que sólo encarcela y que no reconoce las habilidades del niño... sino que las adormece y lo priva de su evolución bajo constante amenaza de persecusión y acoso.

Amar a un hijo es mostrarle nuestro camino pero enseñarle que él debe elegir el suyo y que cuenta con nuestro apoyo.

Amar a un hijo es enseñarle que él es un ser único y valioso y que nosotros somos sus "ángeles guardianes" que siempre lo acompañarán y allí estaremos, cuando nos necesite.

Amar a un hijo es enseñarle a ser independiente.

Amar a un hijo es dejarlo libre.

miércoles, 17 de agosto de 2011

Que tal si para vivir comenzamos por:

- Vivir el hoy, dejando el pasando allá atrás habiendo sanado las heridas.

- Estar en nuestro centro, que es el ahora. Al estar centrados podemos escuchar la voz de nuestro interior, la intuición se potencia y manifiesta cada vez mas claramente, los aciertos son mayores, las sincronicidades se suceden y todo lo que deseamos llega a nosotros para nuestro bien.

- Lo que nos pasa afuera es un reflejo de lo que nos pasa en nuestro interior, somos continuos espejos de la realidad.

- Es necesario pulir una y otra vez nuestro interior. Los sentimientos que transforman la realidad son: la compasión, el perdón, la gratitud, el amor incondicional y la integración…la integración de todo lo que está afuera a través del amor.


Sólo experimentando lo que significa integrar de verdad a TODOS podremos colaborar eficazmente en hacer un poco mejor este mundo.


No alcanza con hacer decretos de abundancia, leer mensajes espirituales o repetir OM durante dos horas seguidas si después salimos y criticamos a nuestro vecino, despreciamos a nuestros hermanos, no respetamos a nuestros empleados o generamos divisiones entre unos y otros.


INTEGRAR es un acto profundo de amor incondicional donde el espíritu comprende que todo lo que existe sobre la tierra es parte del universo en evolución. No podemos desechar a nadie y no importa que tan elemental nos parezca. Nuestra tarea es llevar la conciencia hacia la integración y la unidad.


Ser muy espiritual puede ser un término antiguo y hasta no visto en su justa dimensión. Mejor sería ser muy buen humano en proceso de integrar el espíritu dentro del cuerpo. Digo que un muy buen humano aclara las dudas, pone luz a lo confuso… y la luz del espíritu hace evolucionar el cuerpo. El espíritu ilumina también lo que a veces no queremos ver y cuando nos lo muestra no tenemos que temer revisarlo porque el espíritu es siempre generoso y si lo mustra es porque tenemos que transitar ese camino.


domingo, 14 de agosto de 2011

Nuestro Aporte es Muy Valioso

La importancia que tienen las acciones de las personas en el mundo, es más de lo imaginable, y las decisiones que tomamos afectan a la totalidad.



En un mundo de más de seis mil millones de personas, es más fácil creer que la única forma de comenzar una transformación profunda es tomar medidas extremas. Tenemos que aprender a reconocer que cada uno de nosotros lleva dentro de sí la capacidad de cambiar el mundo en las pequeñas cosas, para bien o para mal.



Todo lo que hacemos afecta a quienes nos rodean y comparten nuestras vidas, y sus reacciones, nos afectan y a otros.



El efecto de una palabra aparentemente insignificante se transmite de persona a persona, su impacto crece y puede convertirse en una fuente de gran alegría, de inspiración de ansiedad o de dolor.



Cada pensamiento y cada acción son como piedras que caen en aguas tranquilas, provocando ondas para difundir y expandir a medida que avanzan hacia el exterior. El impacto que tienen en el mundo o que dirección toman, pueden tener consecuencias de largo alcance. Podemos utilizar el efecto multiplicador para hacer una diferencia positiva y que las ondas que se propaguen sean de bondad para que todo el mundo se beneficie.



Si llegara la oportunidad, el destinatario de una buena acción es probable que se sienta obligado a hacer una buena acción a alguien más. Alguien va a sentir los efectos de esa energía positiva que será más probable contrarreste la energía negativa.



Un acto de generosidad, una obra reflexiva, o un pensamiento positivo pueden pasar de una persona a otra y hacerse como una bola de nieve hasta convertirse en un movimiento de grupo o un rayo de esperanza que salva la vida de alguien.



Todo cambio tiene un punto de origen. Cada uno debemos creer en nuestra capacidad de ser ese punto de origen para difundir la bondad, o cualquier otro tipo de energía positiva.



Dar categoría al efecto de nuestros pensamientos y acciones, y tratar de actuar con gracia todo lo que sea posible es, realmente, una gran fuente de inspiración para manifestar el bien a nuestro alrededor.



Si sonreímos, nos sonrien. Si elogiamos, nos elogian. Si somos amigables, se hacen amigos. Si somos alegres… la alegria nos rodea. La realidad en donde nos movemos se transforma en un espejo nuestro… y somos nosotros quienes decidimos que queremos.



Tenemos el poder para tocar las vidas de todos los que entran en contacto con nosotros y las personas entrarán en contacto con otras a su vez, llevando esa energía transformadora más allá de nosotros. El impulso de tu influencia crecerá tanto como tus convicciones e irá adelante expandiéndose y llegando a lugares impensados.



Esas ondas podrán ser de amor, bondad, compasión, alegría, compromiso, y ganas de salir adelante como una sociedad unida.



Todo lo que pensamos así genera energía, y es transferible y puede transformar y propiciar el más alto bien para todo el mundo.



En esto, no hay que perder más tiempo… no esperemos más, y comencemos a enviar buenas ondas, seamos positivos, seamos con los otros como somos con nosotros mismos y un mundo como deseamos se irá construyendo a nuestro alrededor y será para cada uno, para nuestros hijos y para todos.



El amor es el único camino para allanar con honestidad desde nuestro corazón, y así, poder tocar las fibras más profundas de todo ser humano. Recordemos que tenemos el poder de cambiar y propiciar el cambiar a otros, para bien; nunca olvidemos el gran potencial que somos.



De lo que suceda, somos responsables… no hay excusas. Es cuestión de creer y actuar ahora. Después, puede ser tarde.



Manos a la obra y a abrir el corazón, nuestra escencia.


Sexalescencia en elsiglo XXI


Si miramos con cuidado podemos detectar la aparición de una franja social que antes no existía: la gente que hoy tiene alrededor de sesenta años. LA SEXALESCENCIA.

Es una generación que ha echado fuera del idioma la palabra "sexagenario", porque sencillamente no tiene entre sus planes actuales el hecho de envejecer.
Se trata de una verdadera novedad demográfica parecida a la aparición en su momento, de la "adolescencia", que también fue una franja social nueva que surgió a mediados del S. XX para dar identidad a una masa de niños desbordados, en cuerpos creciditos, que no sabían hasta entonces dónde meterse, ni cómo vestirse.

Este nuevo grupo humano que hoy ronda o pasa los sesenta, ha llevado una vida razonablemente satisfactoria.
Son hombres y mujeres independientes que trabajan desde hace mucho tiempo y han logrado cambiar el significado tétrico que tanta literatura rioplatense le dio durante décadas al concepto del trabajo.
Lejos de las tristes oficinas de J.C. Onetti o Roberto Arlt, esta gente buscó y encontró hace mucho la actividad que más le gustaba y se ganó la vida con eso.

Supuestamente debe de ser por esto que se sienten plenos... algunos ni sueñan con jubilarse.. Los que ya se han jubilado disfrutan con plenitud de cada uno de sus días sin temores al ocio o a la soledad, crecen desde adentro en uno y en la otra. Disfrutan estando al "pedismo", porque después de años de trabajo, crianza de hijos, carencias, desvelos y sucesos fortuitos bien vale mirar el mar con la mente vacía o ver volar una paloma desde el 5º piso del departamento.

Dentro de ese universo de personas saludables, curiosas y activas, la mujer tiene un papel rutilante.

Ella trae décadas de experiencia de hacer su voluntad, cuando sus madres sólo podían obedecer, y de ocupar lugares en la sociedad que sus madres ni habrían soñado con ocupar.

Esta mujer sexalescente pudo sobrevivir a la borrachera de poder que le dio el feminismo de los 60', en aquellos momentos de su juventud en los que los cambios eran tantos, pudo detenerse a reflexionar qué quería en realidad.
Algunas se fueron a vivir solas, otras estudiaron carreras que siempre habían sido exclusivamente masculinas, otras eligieron tener hijos, otras eligieron no tenerlos, fueron periodistas, atletas o crearon su propio "YO S.A.".
Pero cada una hizo su voluntad.

Reconozcamos que no fue un asunto fácil y todavía lo van diseñando cotidianamente.

Pero algunas cosas ya pueden darse por sabidas, por ejemplo que no son personas detenidas en el tiempo; la gente de "sesenta", hombres y mujeres, maneja la compu como si lo hubiera hecho toda la vida.

Se escriben, y se ven, con los hijos que están lejos y hasta se olvidan del viejo teléfono para contactar a sus amigos y les escriben un e-mail con sus ideas y vivencias.

Por lo general están satisfechos de su estado civil y si no lo están, no se conforman y procuran cambiarlo. Raramente se deshacen en un llanto sentimental.

A diferencia de los jóvenes; los sexalescentes conocen y ponderan todos los riesgos. Nadie se pone a llorar cuando pierde: sólo reflexiona, toma nota, a lo sumo... y a otra cosa.

La gente mayor comparte la devoción por la juventud y sus formas superlativas, casi insolentes de belleza, pero no se sienten en retirada. Compiten de otra forma, cultivan su propio estilo.... Ellos, los varones no envidian la apariencia de jóvenes astros del deporte, o de los que lucen un traje Armani, ni ellas, las mujeres, sueñan con tener la figura tuneada de una vedette.

En lugar de eso saben de la importancia de una mirada cómplice, de una frase inteligente o de una sonrisa iluminada por la experiencia.

Hoy la gente de 60, como es su costumbre, está estrenando una edad que todavía NO TIENE NOMBRE, antes los de esa edad eran viejos y hoy ya no lo son,hoy están plenos física e intelectualmente, recuerdan la juventud, pero sin nostalgias, porque la juventud también está llena de caídas y nostalgias y ellos lo saben.

La gente de 60 de hoy, celebra el sol cada mañana y sonríe para sí misma muy a menudo... Quizás, por alguna razón secreta que sólo saben y sabrán los de sesenta en el siglo XXI.


Fuente: http://ianasagasti.blogs.com

sábado, 16 de julio de 2011

Que hago con mi cabeza?

Siempre tengo dolor de cabeza, siempre me siento como con un bombo en la cabeza… un zumbido… me pesa… ¿qué puedo hacer?»... ¿que hago con este Yo?

¿y si me cambio de cabeza y pongo otra en su lugar?


Imposible… aunque muy tentador. ¡Que tortura nuestra cabeza! No para!


En realidad no hay que cambiar la cabeza como objeto en si… sino que hay que cambiar nuestras ideas… los pensamientos… hacer que deje de pensar como Directora y piense como Hacedora.


Que significa esto?


Dentro de la cabeza se aloja nuestro cerebro, que es como un disco rígido que vamos llenando de información y nuestra “educación y entorno” van programando mientras crecemos…


Cuando comenzamos a ser “independientes” muchas veces ese cerebro y el rinconcito llamado “mente” toman las riendas y comienzan a mandar siguiendo miles de “normas” allí grabadas.


Por momentos, cuando el amor llega a nuestro corazón éste nos guía y conocemos lo que es “volar”… pero muchas veces la fuerza de nuestra mente vuelve a tomar las riendas y se producen esas luchas internas que nos desacomodan y nos sacan del lugar en el que estamos.


Si nos damos cuenta de esto, nos salvamos y en consecuencia salvamos todo lo que nos rodea porque guiados por las emociones conseguimos amalgamar nuestra vida.


Si no nos damos cuenta, muchas veces se rompe todo en nuestro alrededor y muchas otras vivimos con un cuerpo transformado en dolor… dolor de cabeza… si pensamos demasiado, dolor de espalda… si hemos cargado en exceso nuestra mochila, dolor de garganta… si no decimos lo que tenemos que decir…


Evidentemente, siempre tenemos la cabeza física sobre los hombros, pero la que hemos perdido en alguna parte es la cabeza espiritual.


Lo básico y fundamental es que no mande ni una ni otra… encontrar el equilibrio es el secreto.

miércoles, 13 de julio de 2011

La Limpieza del Hogar

Días atrás, Karina escribió “Atacada, limpio y tiro todo lo que no sirva guarda con cruzarse!!!”…

Semejante frase me hizo pensar y salí de la escena y vi que diría hacer la limpieza puede ser otra de liberación, de reencontrarse con uno mismo, aunque esto suene algo poco creíble para muchos, es una realidad, pues ese tiempo que dedicamos a limpiar nuestros hogares nos puede permitir reencontrarnos con nosotros mismos, darnos ese tiempo tan escaso en nuestros agitados días y que muchos no disponen. Hacer la limpieza, para muchos es una tarea aburrida, una carga pesada, algo que “si o si” hay que hacer.

Todo es cuestión de cómo lo encaremos, diría es una cuestión de actitud.

¿Qué pasaría si en lugar de quejarnos al realizar esta tarea, cambiamos nuestra actitud negativa a una positiva?

Los beneficios serán muchos, no solo disfrutaran de la satisfacción y serenidad que aporta ver un lugar limpio despejado, sino que se sentirán más libres, liberaran la energía que nos lleva a realizar nuestras metas y sueños. Pero para ello necesitamos el camino libre de obstáculos. El desorden nos lleva a la confusión, nuestra energía esta bloqueada, mientras que el orden nos da esa claridad de lo que queremos, nuestra energía fluye más fácilmente. Es algo muy simple y básico cuando queremos lograr resultados e ir cumpliendo nuestras metas poco a poco.

El acto de limpiar el placar, el escritorio, la habitación, y cada espacio de nuestros hogares se traducirá en una maravillosa sensación de Libertad, al limpiar nuestros espacios, también limpiamos nuestras emociones, nos liberamos de miedos y confusiones.

Con el orden de objetos emitimos mensajes. Por ejemplo, la acumulación excesiva de objetos emite el mensaje de saturación de ideas, proyectos y planes confusos, muy poco estructurados y poco definidos. El lugar donde se ha acumulado el desorden determina el mensaje que emitimos, refleja nuestro momento presente, como nos sentimos y vivimos:

* Si hay desorden y objetos amontonados en la entrada de la casa, el mensaje es miedo a relacionarnos con otras personas.

* Si hay desorden en la sala, el mensaje es que tememos al rechazo social.

* Si el desorden es en el comedor, el menaje que emitimos es que nos inspira miedo el hecho de no dar pasos firmes y sólidos y una sensación de dominio por parte de la familia.

* Si es en la cocina, el mensaje es de resentimiento o de fragilidad sentimental.

* Si es en el placard, el mensaje es que se nos dificulta el análisis y el manejo de la emociones.

* Si el desorden es en el escritorio o área de trabajo el mensaje es de frustración, miedo y necesidad de controlar las situaciones.

* Si es detrás de las puertas, el mensaje es que tememos a no ser aceptados por los demás o que nos sentimos vigilados.

* Si es debajo de los muebles, es que le damos demasiada importancia a las apariencias.

* Si el desorden y los objetos amontonados están en los pasillos, el mensaje es de conflictos para comunicarnos y miedo a manifestar lo que deseamos en la vida.

* Si el desorden es en bodegas, el mensaje es que vivimos en el pasado.

* Si es en la cochera, el mensaje es que sentimos temor o nos falta habilidad para actualizarnos.

* Si es en toda la casa, el mensaje es de coraje, enojo, desidia y apatía hacia la vida.

No imagino que estarás sintiendo a leer estas líneas pero, más allá del acierto de las definiciones, lo realmente importante es que intentes hacer “orden en tu casa” y éste se transformará en “orden en tu vida”.

Después de esto, estoy seguro que comenzaran a ver la hora de la limpieza como un momento muy importante, es el momento de poner orden en tu casa, en tu vida, a tus ideas, pues hacer la limpieza también es un arte.

Así lo dice Dominique Loreau, escritora francesa que recientemente presento su nuevo libro: “Faire le ménage chez soi, faire le ménage en soi” (Hacer la limpieza en casa, hacer la limpieza en uno) y dice que el arte de limpiar nos permite mantener un cierto equilibrio mental, además de nos permite apreciar mejor el lugar que habitamos, nos deposita en el momento presente.

Finalmente, si quieren darle un toque distinto al tiempo en que limpian sus hogares, haganlo cantando, enciendan un sahumerio o un hornito…, piensen cosas que quieren para sí (uno y su circunstancia) y declárenlas como obtenidas.

Después de esto, estoy seguro que estarán recargados de buena energía, de optimismo y, sobre todo… Esa tarea molesta… la transformamos en algo muy útil para nosotros.

Texto original: Por: Lorena López de Lacaille

domingo, 10 de julio de 2011

No sos vos, soy Yo...

¿Quién te hace sufrir? ¿Quién te rompe el corazón? ¿Quién te lastima? ¿Quién te roba la felicidad o te quita la tranquilidad? ¿Quién controla tu vida?... ¿Tus padres? ¿Tu pareja? ¿Un antiguo amor? ¿La suegra? ¿El jefe?...


Se podría armar toda una lista de sospechosos o culpables. Probablemente sea lo más fácil. Es cosa de pensar un poco y nombrar a todas aquellas personas que no te dieron lo que mereces, te trataron mal o simplemente se fueron de tu vida, dejándote un profundo dolor que hasta el día de hoy no entiendes.


Pero no es necesario buscar nombres. La respuesta es más simple de lo que parece, y es que nadie te hace sufrir, nadie te rompe el corazón, te daña o te quita tu paz. Nadie tiene esa capacidad a menos que tú lo permitas, abras la puerta y entregues el control de tu vida.


Llegar a pensar con ese nivel de conciencia puede ser tarea no fácil, pero es más simple de lo que pensamos. Si comprendemos que lo que está en juego es nuestra propia felicidad lo complejo da lugar a lo posible.


El hombre sufre no por lo que le pasa sino por lo que le parece que pasa. Casi siempre sufrimos por tratar de dar respuesta a preguntas que rondan nuestra mente como: ¿Por qué no llamó? ¿No piensa buscarme? ¿Por qué no dijo lo que yo quería escuchar? ¿Por qué hizo lo que más me molesta? ¿Por qué se me quedó viendo feo? y muchas otras.


No se sufre por la acción de la otra persona, sino por lo que sentimos, pensamos e interpretamos de lo que hizo, por consecuencia directa de haberle dado el control a alguien ajeno a nosotros.


Lo más curioso e injusto del asunto es que la gran mayoría de las personas que nos "lastimaron", continúan con sus vidas como si nada hubiera pasado; algunas inclusive ni se llegan a enterar de todo lo que estás viviendo en tu mente.


Un claro ejemplo de la enorme dependencia que podemos llegar a tener con otra persona es cuando hace algunos años alguien me dijo:


"Necesito que me digas que me quieres aunque yo sepa que es mentira. Sólo quiero escucharlo de su boca y que me visite de vez en cuando aunque yo sé que tiene otra familia; te lo prometo que ya con eso puedo ser feliz y me conformo, pero si no lo hace... siento que me muero".


¿Realmente esa será la auténtica felicidad? ¿No será una tortura constante que alguien se la pase decidiendo nuestro estado de ánimo y bienestar? Querer obligar a otra persona a sentir lo que no siente... ¿no será un castigo voluntario para nosotros?


No es posible pasar la vida dando el poder a alguien más, porque terminaremos dependiendo de las decisiones de otros, convertidos en títeres de sus pensamientos y acciones.


Las frases que normalmente se dicen los enamorados como: "Mi amor, me haces tan feliz", "Sin ti me muero", "No puedo pasar la vida sin ti", son completamente irreales y falsas, diría que son “una manera de decir”. No porque esté en contra del amor, sino porque realmente ninguna otra persona (hasta donde yo entiendo) tiene la capacidad de entrar en tu mente, modificar tus procesos bioquímicos y hacerte feliz o hacer que tu corazón deje de latir.


Nadie puede decidir por nosotros. Nadie puede obligarnos a sentir o a hacer algo que no queremos, tenemos que vivir en libertad. No podemos estar donde no nos necesiten ni donde no quieran nuestra compañía. No podemos entregar el control de nuestra existencia, para que otros escriban nuestra historia. Tal vez tampoco podamos controlar lo que pasa, pero sí podemos decidir cómo reaccionar e interpretar aquello que nos pasa.


La siguiente vez que piense que alguien lastima, hace sufrir o controla nuestra vida, debemos recordar que “No es él, no es ella...ERES TÚ quien lo permite y está en tus manos volver a recuperar el control”


"Al hombre se le puede arrebatar todo, salvo una cosa: la elección de la actitud personal que adoptará frente al destino para decidir su propio camino".


Fuente: Viktor Frankl, neurólogo, siquiatra y el fundador de la logoterapia

domingo, 26 de junio de 2011

Secretos que no debieran ser

Son secretos un sin fin de cosas que se nos escabullen porque elegimos vivir corriendo… o porque no nos queda otra, la vida no nos dio chance de elegir en algún momento y hoy es casi… por inercia.

Y así vivimos… corriendo, casi sin tiempo para tomarnos un respiro y con un objetivo largo que evita nos detengamos un segundo a ver donde estamos parados… a ver quien está o paso a nuestro lado… casi sin chistar.

Y miramos que hacer, para donde ir y como…

En un mundo que corre, no podemos No correr… nos pasaría por encima… pero si podemos elegir cuando parar un poco… escuchar… nos.

Muchas veces nuestra voz interior parece muda… en realidad está disfónica de tanto gritar y ser ignorada… Aunque en realidad no la ignoramos, la sentimos como un murmullo tapado por el ruido externo de nuestro habitat.

Este ruido es tanto que hasta hace que nos olvidemos de nosotros mismos y simplemente transitamos para otros perdiendo el objetivo de ser el centro que irradia luz a todo lo que nos rodea.

Es como meterse dentro de casa un día de viento… porque nos despeina…

Si dar un beso… despeina…
Si correr… despeina

Si bailar… despeina
Si hacer el amor… despeina
Si mirarte a los ojos y dejar salir lo que tengo dentro… despeina

¿Por qué no? Vivir despeinado.

El secreto más grande es soltarse… es dejarse ser… es, simplemente, detenerse un poco… para después correr y dejar que el aire que atravesamos… nos despeine.

lunes, 20 de junio de 2011

Que es el SER, realmente.

El Ser es infinito y es unir internamente todas nuestras distintas facetas en una sola cosa, sin tensiones, y desde allí manifestarlo de múltiples maneras, cada una con sus particularidades, funciones, facultades y poderes.


El Ser auténtico proviene desde la más pura y elevada región divina y trascendente y, desde allí, podemos entender que son unidades conscientes e independientes.



Nuestro Espíritu nos impulsa al trabajo sobre uno mismo por medio de nuestra Esencia, sin embargo, nuestra pureza se va perdiendo a medida que nos vamos convirtiendo en adultos, convirtiéndose en su totalidad por el ego.



SER vs EGO… ¿3 contra 3…?



En la vida tenemos dos opciones… integrarnos con el SER o con el EGO.



Parece una lucha despareja porque el EGO se muestra muy fuerte y nos muestra permanentemente que tan bien vivimos con él como líder de nuestra vida.



El ego es tan poderoso que comprende todo lo bueno que es el conocimiento…



Para poder elegir entre SER o EGO tenemos que aprender la diferencia entre vivir sin tensiones o vivir con los dientes apretados. Lo primero propone vivir disfrutando todas las cosas y lo segundo vivir en una lucha permanente, con nosotros mismos.



Desde el SER encontramos los valores del Espíritu y de estos emergen las bellas artes, sea un cuadro, una sinfonía musical, una escultura, un libro, una obra arquitectónica, la danza, el canto…



Todos esos valores son innatos en nosotros pero su manifestación será a través del SER o del EGO, allí comienza a verse la diferencia.



Entre los valores trascendentes del Espíritu tenemos el amor, la verdad, la belleza, el altruismo, la templanza, la voluntad verdadera, la paciencia, la serenidad, etc. y para integrar las partes del Ser debemos rebelarnos con nuestra propia naturaleza egocéntrica, que es la antítesis, si es que en realidad anhelamos que el Ser se manifieste completamente en nosotros.



Si pensamos que “Somos por afuera tal como somos por dentro”, hay que equilibrar el Ser con el Saber, pero antes que nada necesitamos hacer conciencia de lo que es el SABER.



Alguien puede “saber” mucho de fabricar automóviles, puede conocer la Medicina, la Jurisprudencia, o puede haber estudiado realmente en diversas escuelas que hablan del SER y del espíritu y de todo lo bueno que esto trae y poseer una gran erudición, sin embargo podría suceder que esa persona tuviese una muy baja moral. ¿De qué serviría poseer una gran erudición y todos estos conocimientos si no tenemos desarrollados al SER INTERNO, si poseemos, dijéramos, defectos horripilantes? De nada serviría eso.



Ser y Saber son relativos y existen distintos grados de Saber. En cuanto al Ser, también todo es relativo, hay quienes tienen más desarrollado el Ser que otros y no hay duda de que el Ser (por ejemplo) de un Santo (Sai baba, Madre Teresa, etc), está más desarrollado que el de un perverso, podemos afirmar que cada persona tiene SU nivel de Ser.



Lo más importante que se necesita tener un equilibrio muy especial para lograr un SER en toda su dimensión sin importar su nivel.



Conseguir el SER en su nivel más elemental es poner en sintonía el equilibrio Mente-Corazón… reducir a cero el conflicto entre lo que quiere nuestra mente y lo que quiere nuestro corazón… cuando esto sucede es que resultamos ser un “BUEN DUEÑO DE CASA”.



Ser un “Buen Dueño de Casa” nos invita a la reflexión.



Lo que queremos es alcanzar la UNIDAD DE LA VIDA, integrarnos, convertirnos en Individuos perfectos y eso es posible trabajando sobre nosotros mismos, eliminando nuestros propios errores psicológicos. Si lo logramos, nos convertimos en Individuos con sabiduría e iluminación.



Así es, solamente uniendo el Ser y el Saber, se llega a la comprensión verdadera, y solo con comprensión verdadera podemos trabajar sobre nosotros mismos para pasar de un Nivel del Ser, a otros Niveles del Ser más elevados y profundos.



Elevado y profundo? Si porque para llegar lejos debemos ir muy dentro de nosotros para sacar lo mejor, nuestra esencia.



Es así que nos hacemos íntegros, únicos y completos, y ello solamente es posible subiendo por las distintas etapas que forman los Niveles del Ser.



Es así que entramos en sintonía con los otros… con esos que están a nuestro mismo “nivel del Ser” y nos potenciamos y se hace más fácil ir por el siguiente nivel… sin olvidar el sendero que hemos transitado.



Hay muchas personas que se dan cuenta toda esta cosa “espiritual y del SER” y cuando se miran al espejo sus mentes perciben que están perdiendo “fuerza” y es cuando sus egos fabrican una fachada Espiritual y es así como se “acorazan” en esas personas adoptando un discurso pseudo espiritual… transformando una manera de vida en una herramienta de vida.



Estas fachadas son muy difícil de ver excepto al circulo íntimo no embelezado por esas personas… pero cuando es advertida es muy fácil verlo y esas personas se desdibujan.



Conocí una de éstas personas y, cuando me contaron acerca de esto… simplemente lo desestimé, pero el tiempo me hizo ver ciertas conductas que cada vez hacían más real la verdad.



De esto nada malo para el “actor”, es decir… él se lo pierde, pero podría serlo para quienes “compraron el discurso de buena fe y sienten la necesidad de SER” ya que caído éste… el daño puede ser enorme.



Y desde aquí… ¿Es posible mezclar frivolidad y SER?



Definitivamente No, pero no debemos olvidar que transitar por los extremos nunca nos llevará a buen puerto, Ni tanto de uno ni tanto de lo otro.



Equilibrio, siempre. De eso se trata, definitivamente.



Y finalmente… una pregunta. ¿Cuántas veces pensamos que esa persona podría ser mucho más con sólo proponérselo?... y los abandonamos porque no aprovechan su potencial.



¿No nos damos cuenta que, tal vez, eso que podrían ser a ellos no les interesa y si a nosotros?



Tal vez, si así fuese… podríamos mirar a esa persona y comprender que eso que pensamos es bueno para él no necesariamente esa persona tiene en sus necesidades.



Desde este nuevo lugar es posible ver a los demás como seres íntegros en lo que son que vivirlos de una forma más completa.



TU ERES LO QUE QUIERES SER, NO LO QUE YO QUIERO QUE SEAS.