domingo, 25 de julio de 2010

¿Amor o Miedo?

Seamos hombres o mujeres tenemos un sueño personal en nuestra vida y ese sueño es totalmente diferente al de cualquier otro. Cada relación que tenemos es única porque cuando nos enlazamos con un compañero/a soñamos un pequeño sueño juntos. Y los sueños están cargados de emociones.

Estas emociones pueden ser muchas pero, el autor de La maestría del Amor (Miguel Ruiz) estas emociones podemos decir que van por el lado del Amor o por el lado del Miedo.

¿Amor o Miedo?

Si, Amor o miedo. Son las dos maneras de como encaramos una relación.

Y será una cosa u otra dependiendo de cómo seamos cada uno de nosotros.

Depende de la percepción que cada uno de nosotros tenga, depende de la manera en que encaramos la vida… depende de cómo elegimos vivir.

En el amor NO existen obligaciones. El miedo está LLENO de obligaciones.

Si nuestra forma de encarar la relación es a través del miedo, cualquier cosa que hagamos es porque “tenemos” que hacerla y esperamos que otras personas hagan algo porque tienen que hacerlo. Tenemos, tenemos, tenemos que hacer algo y por eso nos resistimos a hacerlo.

Cuánta más resistencia ponemos, más sufrimos.

El amor NO tiene resistencia y, TODO lo que hacemos es porque QUEREMOS hacerlo.

El amor no tiene expectativas. El amor no mide, no compara.

El miedo está lleno de expectativas. MIDE, COMPARA… yo te amo mas que vos a mi o al revés…

Con el miedo esperamos algo y si no sucede, nos sentimos heridos; no es justo. Culpamos a todos porque no nos han satisfecho.

Cuando amamos no tenemos expectativas. Cuando hacemos algo es porque queremos y si el otro no quiere lo mismo, no lo tomamos como algo personal. Por eso, cuando amamos NO sufrimos y cuando tenemos miedo, SI.

El amor está basado en el respeto mutuo.

El miedo no respeta nada ni siquiera se respeta a sí mismo.

Y si no nos respetamos a nosotros mismos comenzamos a sentir lástima por nosotros y nos victimizamos y, llega el momento en el que sentimos lástima por el otro, y dejo de respetarlo porque creo que no puede hacer sus propias elecciones. Entonces, como no lo respeto, intento controlarlo.

Aquí… el otro puede sentirse atrapado, puede sentir que le “falta el aire”… siente ese control… y reacciona.

El amor no tiene piedad porque No siente lástima por el otro… simplemente (y nada más) lo ama.

El miedo está lleno de pena, siente lástima por uno mismo y por el otro.

El amor respeta. El amor confía. El amor deja hacer. El amor no exige. NO pide, DA.

Te amo, sé que puedes hacerlo. Sé que eres lo suficientemente fuerte, lo suficientemente inteligente, y lo suficientemente capacitado para hacer tus propias elecciones.
El amor siempre es amable, el miedo siempre es violento (no desde lo físico).

Con el miedo nos llenamos de obligaciones, de expectativas, perdemos el respeto, evitamos la responsabilidad y sentimos lástima.

¿Cómo podemos sentirnos bien cuando el miedo nos hace sufrir tanto?
Nos sentimos víctimas por todo, enojados o tristes, celosos o traicionados. Porque el enojo no es otra cosa que la máscara del miedo.

El amor es incondicional, el miedo está lleno de condiciones.

En el camino del miedo, te amo si permites que te controle, si eres bueno conmigo, si te ajustas a quiero que seas. Para amarte vos tienes que ser como YO quiero seas, tienes que pensar como YO quiero… tienes que SER lo que YO quiero.

En definitiva… esto es no te amo a vos, sino a la imagen que formé de vos.

En el camino del amor no hay condiciones. Te amo sin que hayan razones ni justificaciones de por medio. Te amo como sos y puedes ser tú mismo.

Te amo porque SI… porque cada vez que te veo o pienso en vos… mi corazón da saltos… y no sé porque... me siento feliz.

sábado, 24 de julio de 2010

La guerra de los mundos

Fue una gran película de Orson Wells que causó terror en los inicios del cine sonoro…. parecía real... y hasta hubo suicidios...

En los días de hoy la guerra de los mundos se relaciona muchísimo a las parejas… que no lo son tanto ya que si lo fueran… realmente estarían "emparejados" y no en “guerra”.

Porque? Porque en guerra?

En muchas parejas sucede que cada uno de los integrantes (o al menos que tratan de hacerlo) viven en “su mundo” y sólo comparten algunos momentos con el otro que también continúa en “su otro mundo”.

Esto ocurre frecuentemente cuando dos personas que se acostumbraron a vivir solos… se encuentran y tratan de armar algo juntos… o mejor dicho, tratan de acompañarse en ocasiones.

Intenciones sobran y ganas pero… uuuffff … siempre hay un pero!


Cuando se trata de armar algo cada uno pretende que el otro se adapte al mundo propio y no de “crear un nuevo mundo de los dos”.

Si, de eso se trata… de Crear Un Nuevo Mundo en donde la mayoria de las cosas es de los dos.. y cada uno tiene que ver… respetando el espacio del otro y haciéndolo propio cuando sea necesario… como dando soporte…. Estando atento… Tendiendo una mano con el corazón abierto.

Y tan complicado es? Y… SI.

Es muy complicado porque generalmente pasa que nos aferramos a lo conocido (a nuestro mundo) porque nos sentimos seguros y muchas veces estamos solos porque cuando tuvimos un mundo compartido con alguien especial… fuimos lastimados muy duramente y nos da mucho miedo que suceda otra vez y no tener las fuerzas (a ésta altura de nuestra vida) para superarlo.

Pero… ¿y que hacemos?

Hay dos alternativas… La más cómoda y que no tiene riesgos es quedarse adormecido en nuestro mundo cerrando la posibilidad de dar el Gran Salto y buscando cubrir nuestra necesidad de afecto con pedacitos de la vida de familias adorables que están cerca nuestro sintiendo que somos dueños de nuestra vida porque no tenemos que pedirle permiso a nadie para hacer lo que queremos.

La otra posibilidad es arriesgarse y dar un salto en la calidad de nuestra vida tomando las riendas de ella… buscando un buen compañero/a para intentar hacer un mundo nuevo... que sea de los dos… un mundo propio y nuevo, mucho más rico que ese mundo solitario y con compañías prestadas.

Es como la ruleta… juegas a colores, pares o impares… o vas por un pleno?

En los primeros pasas el tiempo jugando y quedas “hecho”, pero si aciertas un pleno…. Ahí si que ganas y no ganas cualquier cosa... "Ganas el Gran Juego"
... el juego de TU vida.


Y si pierdes?… Puede pasar pero, con un poco de resto, puedes mirar el tablero y con buena intuición… buscar un pleno… que sale… Siiiii… Sale… Para ganar hay que correr cierto riesgo… sino… no es posible ganar y mucho menos darle valor a lo ganado.

Que hacer entonces?.... vivir una vida a medias… o luchar por una vida plena y completa?

Está en cada uno la elección… y no hay que demorarse mucho en esto porque el tiempo pasa muy rápido, se esfuma... y cuando nos damos cuenta… el tiempo pasó.

Y no se le puede pedir al tiempo que vuelva!

Mi mundo es muy rico… y el tuyo también… pero Nuestro Mundo puede ser 1000 veces mejor…


Y vale la pena ser vivido!

Sólo hay que tomar ciertos riesgos y abrir el corazón… un poco... al principio


Y después COM PLE TA MEN TE.

Ah... me olvidaba de algo importante... mucho

Que hayamos creado un nuevo mundo de los dos... no significa que cada uno pierda el mundo que tenía antes...

Esos mundos siguen existiendo, pero "condimentados" con todo lo nuevo de lo que aporta cada uno.

La historia de Mía

Publicado en Ciudad.com el 24 de julio de 2010.

Mía cuenta:

Hola a todos!! Mi historia comienza hace un año atrás, por ese entonces estaba sola y bastante feliz. Conocí a quien en estos momentos es mi pareja (eso digo yo). Cuando lo conocí, él estaba casado y atravesaba un conflicto marital.

En un primer momento yo lo aconsejaba y trataba de que pensara y analizara sobre su situación. Pasaron los meses y de esa relación nació una especie de cariño mutuo. Una relación de amantes, mejor dicho.

Jamás ocultó sus sentimientos por mí. Y eso causaba constantes discusiones porque él seguía viviendo con su familia.

Hace 3 meses está separado, pero todavía no podemos realizar nada. Y eso me duele y me lastima mucho y me siento egoísta porque no puedo aceptar a su hijo. Odio que cada vez que tenemos que vernos, a la madre del nene se le ocurre dejarlo ver, y ese es otro punto, nunca podemos salir de paseo porque la "ex" puede enterarse y él no quiere.

Entonces, ¿Qué puedo hacer? ¿Dejarlo y seguir mi vida?

Y lean que le contestan en Ciudad.com. (No está firmado)

Querida Mía, creo que deberías pensar en esta situación desde afuera.

¿Qué es lo que te está pasando? Analizá un poco.

Mientras estuvo con otra persona, vos seguiste ahí. No te ibas. No te cuestionabas si te importaba o no te importaba.

Después se separó. ¿Y qué pasó? Llegó el miedo.

Vivías sola y feliz y de buenas a primeras, te encontraste con un hombre que está al lado tuyo. Un hombre con ex mujer, un hijo, una vida, un pasado, dos manos, dos piernas, una boca. Un hombre real con problemas reales que viene a atentar contra tu soledad y vida feliz de mujer soltera.

Antes, era mucho más fácil.
Antes, su ex oficiaba de pantalla.
Antes, en realidad, nada podía salir mal porque todo ya estaba mal.

Cuando conseguiste su disponibilidad, él te enfrentó a la magistral tarea de que vos tengas que dejar tu egoísmo de lado.

Ya no sos suplente. Entraste como titular.

Ahora la pelota está en la cancha, corriendo. Habrá que ver si te permitís salir jugando o si vas a dejar que el miedo te gane el partido...

Hasta aquí el artículo... y la situación se parece en mucho a muchas otras... y es que a veces nos hemos acostumbrado a vivir solos y le tomamos miedo al compromiso, le tomamos miedo a que nos lastimen cuando decidimos "entregarnos" al otro... nos dá miedo comprometernos en un proyecto de a dos y "fracasar".

pero Fracasar es... NO HABERLO INTENTADO !!!

¿no te parece?


martes, 20 de julio de 2010

AMOR es…

Que es? Es posible definirlo? Es necesario?

Y… a veces si, es necesario cuando sentimos hemos perdido el rumbo.

Para conservar al amor con nosotros 3 cosas necesitamos: honrarlo cuando está presente, valorarlo cuando está ausente, y asistirlo cuando lo necesite.

Gran parte de la vitalidad de un amor reside en el respeto de las diferencias, no sólo en el disfrute de las semejanzas.

Tomamos mucho tiempo hasta descubrir un amor; pero sólo un instante en perderlo.

El amor es un alma que habita en dos cuerpos y un corazón que habita en dos almas.

El verdadero amor es la que sigue a tu lado incluso cuando no le queda nada por ofrecer, salvo su compañía

A veces, una separación , a la vez que amortigua los rencores despierta al amor

El amor es como un lucero que siempre ilumina las estrellas del cielo

No hay que buscar al amor sin defectos, porque nos quedaremos sin amor toda la vida.


Tampoco buscar los defectos en tus amores, pues poco a poco nos quedaremos solos.

A todas el mundo le interesa nuestro exterior; el interior, sólo a nuestro amor.

Si queremos hallar en cualquier parte amor, dulzura y poesía, tengamoslos con nosotros.

Es una regla en el amor que cuando la desconfianza entra por la puerta, este sale por la ventana

¡Qué raro y maravilloso es ese fugaz instante en el que nos damos cuenta que lo hemos encontrado!

Hemos aprendido a volar como los pájaros, a nadar como los peces, pero no hemos aprendido el sencillo arte de vivir juntos como amantes y compañeros.

El amor es la fuerza espiritual que una persona recibe, cuando descubre que hay otra que cree en ella... y descarta la soledad.

En síntesis entre todo esto podemos descubrir una parte. La otra, la más importante sólo la sentimos, la intuimos y, no podemos siquiera describirla.

Tanto que, aún amando… dejamos partir al otro si sabemos lo lastimamos.

jueves, 8 de julio de 2010

En carne propia

Se dice que muchas veces la experiencia es propia y no es posible enseñarla o trasladarla a otros y que sólo es posible aprender por lo que nos pasa, y ahora me tocó a mi.

Hace unos cuantos años mi pareja siempre me reclamaba cariño, mimos, caricias... más besos...

Pero no, decía "Yo soy así, algo seco tal vez, pero eso no quiere decir que no te ame..." y allí dejaba el tema.

Claro que no entendía que me pedía si, como contrapartida o como "compensación" tenía otros gestos en los que expresaba mi "cariño" como preparar el desayuno y llevarlo a la cama, pequeños regalos sin razón aparente y sorpresivos, y otros muchos más que "compensaban" la carencia. Al menos era lo que yo creía.

Pero nada más lejos de la realidad, la carencia era eso... era la falta de lo que necesitaba el otro y que no le dábamos.

Frente a esto, ¿que se puede hacer?

Desde el lado que pide... Pedir con inteligencia y ser paciente, ya que en las personas los procesos llevan tiempo y no siempre ese tiempo se adecua a nuestras necesidades.

Del otro lado, no ser necio y no usar el "yo soy así" como escudo y tratar de entender el pedido del compañero/a y ver que podemos hacer.

Probablemente no sea algo tan difícil de lograr y los beneficios pueden ser muchos, no porque el que había pedido lo que necesitaba tendrá lo que necesitaba sino porque eso seguramente volverá a nosotros de muchas maneras. Afecto retribuído, una mejor relación, más conexión con el compañero/a pero, sobre todo lo que hemos dicho, el beneficio mayor será el personal ya que nos sentiremos mejor, más relajados y felices con nosotros mismos.

Muchas veces negamos afecto, actos cariñosos,gestos y detalles por temor a no ser retribuidos.

El punto es que no tenemos que ocuparnos en que tanto recibimos, sino en que tanto damos.

Sólo así se inicia un camino en el que no hay cuentas, no hay debe y haber... sólo hay dar...

¿Recibir?... Vendrá... y si no lo esperamos... mejor... ya que lo sentiremos como un regalo, y los regalos siempre son especiales y gratificantes.

Así, simplemente, nuestra vida y como nos relacionámos con los demás puede cambiarnos la manera de vivir.

Vivir así, sin duda, resultará fantástico.

Aflojate... y disfruta la vida... que sin darnos cuenta se nos va un poquito cada día.

miércoles, 7 de julio de 2010

Yo soy así...

Es la negación en si misma, es la manifestación de la voluntad de no cambiar y la de reconocer nuestro miedo a algo mejor.

Cada vez que decimos esto, es como que buscamos la justificación a nuestro comportamiento que ha sido cuestionado.

Muchas veces nos comportamos a la defensiva, como en guardia, como dentro de una caparazón que nos protege... ¿de qué? ¿de la exposición? ¿nos protege o nos aisla del contacto con los otros?

Talvez por aquí deberíamos comenzar a preguntarnos... talvez ese "yo soy así" es el escudo que interponemos al avance del otro buscando derribar las barreras que hemos puesto para defendernos.

Y otra vez pregunto... ¿defendernos de qué? Tal vez tengamos miedo de entregarnos y que cuando esto haya sido así ese personaje a quien nos entregamos nos lastime.

Puede ser que así sea, pero... si no nos arriesgamos un poco no podremos disfrutar la vida.

Sin entrega no hay disfrute, debemos entregarnos para poder encontrar la felicidad, la dicha, para poder sentirnos plenos, completos. Claro que no nos debemos entregarnos a cualquiera, debemos hacerlo a ese SER diferente, ese que se muestra como es, sin temores, y anda (al menos lo intenta) por la vida sin verguenza y con amor por lo que es y lo que tiene.

Porque es que no nos arriesgamos? A veces decimos que "estamos curtidos de dolor" y puede ser verdad y producto de muchos acontecimientos terribles que nos dejaron marca.

Ahora bien, es posible vivir así? Si es posible... si aceptas una vida gris.

Es posible ser feliz así? Seguro que no, siempre estará buscando que la vida te traicione nuevamente sacandote lo que amas y así, definitivamente, nunca lo tendrás.

No hay que tirarse al vacío, NO NO... hay que ir al frente, con la frente en alto y el corazón iluminado... esto será nuestro escudo que vencerá cualquier cosa.

Seguramente si nuestro corazón está iluminado, del otro lado hay alguien que está mirando esa luz y es feliz con ella... inmensamente feliz.

Sólo hay que animarse un poco, tomadonos del pasamano para no caer y ganar confianza con nosotros mismos... si hasta muchas veces nos convencemos a que no tenemos derecho a la felicidad y que asi como estamos, estámos bien.

Coraje, confianza, vista al frente y no al pasado, deseos de vivir hoy y soñar un poquito con que será mañana...

Sólo eso necesitamos... sólo eso... y la dicha se apropiará de nosotros y será tiempo de preguntarnos... ¿porqué dejé pasar tanto tiempo? ¿porqué no me animé antes?

Y la única respuesta posible debe ser... no importa, no se puede volver atrás... vamos hacia adelante!