domingo, 13 de enero de 2008

Ego vs corazón

Esto es la lucha diaria que en mayor o menor medida libramos.
Según quien sea el "vencedor" serán los resultados.
Desde mi poca experiencia (voy por más) empiezo a sentir que no hay que permitir que la mente (ego) interfiera en los asuntos del corazón.
Hace un tiempo ya, una vez puede sentirme (por un momento) extraordinario y he comenzado a reconocer en mí y sería muy bueno puedas hacer lo mismo porque ... es de no creer !!!.
Cuando pienso en lo extraordinario que pude sentir siento la necesidad de sentirlo siempre, no por lo superlativo de ello, sino porque lo siento como una brisa fresca que me envuelve una noche de verano.
Se han preguntado ¿cuantas veces hemos mirado el cielo en una noche estrellada?
Es muy probable que sean muy pocas.
La misma respuesta es frecuente escuchar cuando nos preguntamos ¿cuantas veces haz mirado en tu interior?
De hecho, nuestro interior es tan poco visitado que está muy deslucido y no resulta atractivo. Es como que la mente lo muestra deslucido por interés propio ya que si lo encontramos bello su poder puede superar al de nuestra mente.
Si aprendemos a mirar frecuentemente y aprendemos como elije el corazón empezaremos a conocer nuestra esencia, nuestro verdadero ser, y será entonces que lo encontraremos cada vez más extraordinario.
Lo primero que se me ocurre es que ahora hay que aprender a usar a éste ser interior aunque en realidad lo que tenemos que aprender es a dejarnos llevar por él.
Lo que hay que aprender es a confiar en él, las elecciones hechas con el corazón no son erradas en tanto, las elecciones de nuestra mente tienen fecha de vencimiento. Es decir, alcanzado el objetivo caducan, o cuando nos damos cuenta que no nos daban lo que queríamos las cambiamos por otras que posiblemente nos de la satisfacción que buscamos.
La elección del corazón nos da siempre lo que necesitamos porque si la alimentamos día a día esta elección crece con uno.

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