lunes, 13 de julio de 2009

El miedo… que instrumento!

Parece que se viene el miedo, oleadas de miedo, cada día, semana, mes, el objeto de nuestro miedo va variando y ahora los titulares son ocupados por el nuevo virus de la gripe. Claro que hay gripe, claro que es muy contagiosa, claro que algunas personas mueren; pero ¿no habrá algo más detrás del asunto?

No sólo la manipulación política del caso en nuestro país esperando el resultado finalmente adverso de las elecciones. No sólo las multinacionales experimentando con el miedo y generando pestes para fabricar vacunas que en apariencia las combatan, con el tendal de dólares incorporado, hasta la próxima temporada con su correspondiente peste.

¿No será que la naturaleza humana cuando la mente la puede es pasto fácil de cultivo de laboratorios y gobiernos o de quien use al miedo como arma para dirigir las voluntades?

Con el miedo es muy fácil manejarnos y nacemos con miedo, vivimos con miedo y morimos con miedo. Hay que cuidarse sí, ser prudentes, alimentarse bien, cambiar la estructura de nuestra alimentación, elevar las defensas desde el pensamiento y buscar lo positivo, desde adentro y las ganas por vivir; pero no comerse gato por liebre.

No vivir pendientes de los agoreros, de los apocalípticos, que necesitan contaminar a la gente con futuros temibles, para reinar dentro de la división.


En el caso de la gripe, no se actuó a tiempo?

¿y desde cuándo uno iba a pretender que las autoridades lo hicieran?

Está en Uno hacerse reflexivo, dejar de juzgar lo bueno o lo malo de acuerdo a como está nuestro bolsillo, dejar de consumir la venta de basura y hacernos fuertes en nuestra visión interna.


Generar una fuente de poder firme que no haya virus o crisis que se meta en forma destructiva.

La comprensión de que somos más que lo que se nos dice que somos, es la línea que separa al dormido del despierto. Quien está despierto se hace dueño de su vida diaria, y el miedo es dormir.

El miedo es el ego con que se nos cría y alimenta desde el poder de turno, con el nombre propio que queramos y sucede en el mundo, continente, país, empresa, familia, en cada rincón donde el inepto quiere ser dueño de tu vida.

Un antiguo cuento decía que iba La Peste camino a una gran ciudad cuando se encontró con José. éste le preguntó ¿A dónde vas? La Peste le contestó: "A la ciudad, a matar a diez mil personas". Después de un tiempo, La Peste volvió a encontrarse con José, que muy enojado, le dijo: "Me mentiste. Dijiste que matarías a diez mil personas y mataste a cien mil". Y La Peste respondió: "Yo no mentí, maté diez mil, el resto... se murió de miedo".

La peste, gripe aviar porcina a n1h1, crisis o como quieras llamarle, primero aparece en tu mente y después invade tu cuerpo, familia, empresa, ciudad, país, mundo…

Está en cada uno generar la mejor vacuna. Y la mejor vacuna es tener una actitud positiva, optimista. Hacernos dueños de nosotros y dominar nuestra situación.


No hay gripe o crisis que se anime a entrar en nosotros si estamos fuertes.

1 comentario:

Unknown dijo...

Es cierto Marcelo, de la mano del miedo somos frágiles y vulnerables.
La confianza, en cambio, nos armoniza. Que estés bien. Silvia Lavia. jue 16 julio 2009