Día del Padre, Siempre hay mil formas de aprender a crecer

El día del padre fue un gran día para mí, un papá muy feliz con la hija que la vida me regaló y por muchas cosas que ese día sucedieron.

Lo cuento en orden de suceso ya que como verán lo trascendente de cada hecho es muy variado y rico.

Empecé el día cuando fui a buscar a mi hija a la casa de su mamá y me regaló su tarjetita de felicidades en mi día que había realizado ella con ayuda de su abuela materna (la mamá aun no tiene la fuerza para ocuparse ella de actividades de la niña relacionadas conmigo). Después de esto, el regalo en sí (comprado por la mamá) que me sorprendió porque era un regalo importante y que no esperaba.

Pasé el día en la casa de mis viejos y allí estaba mi hermano que por el paro del campo no pudo regresar a Tucumán.

Esto fue lo más “revelador” del día ya que fui observador del maltrato (por teléfono) que hizo a su mujer y a nuestro padre en forma gratuita.

Fue revelador para mí ya que en un momento me vi a mi mismo hace unos 14 meses y quedé espantado. Sinceramente no puedo creer que algo así fui en algún momento de mi vida y no encuentro ninguna razón que lo justifique.

Entendí que él se siente muy mal por lo que le está pasando en la relación con su mujer y que no ve ni entiende porqué y no encuentra el coraje de salir de esa situación. A mi me sucedió parecido y mi ahora ex, en aquel momento tuvo el valor de patear el tablero y darme el mas grande Tsunami (creo nunca esto puede ser un término mas exacto) que sufrí en mi vida.

De repente me habían expulsado del paraíso al mismísimo infierno.

Pero ¿Cómo pasa esto si no cedí a la tentación? no comí la manzana! – Esto era lo que constantemente me decía a mi mismo.

Hoy sigo expulsado de ese paraíso, he salido del infierno y estoy preparado para encontrar un nuevo paraíso aunque en realidad creo lo estoy encontrando en mi y estoy casi preparado para compartirlo con alguien en algún momento.

Nunca esperé mi hermano me enseñara nada, pero su actitud me enseño mucho más de lo esperado y fue de máxima importancia porque me mostró una imagen de mi totalmente detestable.

Esto movió dentro de mí un sinfín de emociones y sentimientos. Trajo a mi memoria miles de recuerdos (no precisamente bellos) que me dejaron muy pensante desde el corazón.

Esto me movió. Me hizo ver todo el daño que, por amor, había hecho a la persona que más amé en toda mi vida. Ahora me pregunto, ¿Cómo pudo ser? Y … fue. La inconsciencia, el ego, el no saber, el no estar a la altura de las circunstancias, miles de respuestas a una pregunta que no puede ser respondida con certeza. Simplemente sucedió.

Y el resultado de todo esto fue una fuerte necesidad de perdonar y pedir perdón.

Que difícil es!!! Después de un año creo que recién ahora es genuino. Pasé por un sinfín de sentimientos … ho .. rri .. bles, pero sólo conseguía atormentarme más, sólo conseguía ser más infeliz y perder el rumbo. Sólo conseguía prolongar el dolor, sólo conseguía seguir “patinando en el barro”.

Yo he perdonado a mi ex, desde mi corazón. No importa si ella se enamoró de otro, pero no es lo importante. Ni siquiera es importante cuando lo hizo, antes durante o después de separados.

Posiblemente lo hizo porque no pudo soportar mi calvario o porque tenía necesidad que alguien la cuidara un poco. No importa que, importa que yo también fui muy responsable de eso.

Por estos días lo que Importa es quien soy hoy, importa adonde pude llegar y todo lo que pude crecer y todo lo que podría seguir creciendo. Depende de mí.

Importa que sienta que estaría muy bueno que en algún momento encuentre la oportunidad para tener una charla con ella y pedirle perdón de la manera más sincera que pueda expresar.

Creo que allí comenzará un nuevo camino para mí. También para ella, posiblemente, pero dependerá únicamente de ella.

Creo haber aprendido que somos artífices de nuestro presente y de nuestro futuro y, tenemos que ser consientes que somos los únicos responsables de todo lo que nos pasa y por sobretodo he aprendido que nada (pero nada) de lo que pueda hacer puede modificar el pasado y mucho menos corregirlo.

Todo lo que hacemos es para hacer nuestro hoy y preparar nuestro mañana.

De nosotros depende como vivimos cada día y lo que no vivimos ayer se perdió.

De todas maneras la vida es muy generosa y cada día nos abre posibilidades infinitas y está en cada uno en saber aprovecharlas.

Finalmente a la hora del cuentito de las buenas noches que cada noche le cuento a mi hija para dormir, me dio el último regalo del día .... ella se iba a "casar" con De Ferrari (compañerito de jardín) porque Marco no era ya su novio (desde hacía 2 años el mismo y tambien compañerito de jardín) porque éste último había pintado de negro el regalito que ella estaba preparando para mí.

Este fue el regalo mas lindo del día, soy el hombre más grande en su vida.

Se que en algún momento eso cambiará y en unos años comenzará a buscar SU hombre, lo que no cambiará es que soy su papá y ella mi hija y el amor entre nosotros es único e incomparable y no importa si nos enojamos por cualquier razón. Ese amor está siempre y siempre sale fortalecido.