martes, 8 de diciembre de 2009

El centro del universo

Es el lugar del origen de todo, después del big Bang…. Millones de partes del todo se expandio por la nada y con los milenios fueron naciendo los mundos… y dio lugar a la vida y fue mágico… de todo uno paso a ser de todos… y el universo es asi… vida, misterio, belleza, movimiento, unos dependen de otros y los otros de uno… cada parte es importante para que todo lo demás sea.

En las personas pasa lo mismo… somos el centro del universo… pero hasta que no tengamos nuestro propio Big Bang, estaremos solos, en la nada.

Después de nuestro big Bang, todo nacerá. Los amigos, la familia, los compañeros de trabajo, los vecinos…. Y un mundo nuevo aparece donde no somos lo UNICO que vale, valemos por todo lo que nos pertenece, por lo que tenemos….

No hablo de lo material, hablo de lo que VERDADERAMENTE tenemos y es la manera que nos relacionamos con los otros, los que son “amigos”, la familia, los compañeros en nuestros trabajos y, sobretodo, con aquellos a quienes consideramos nuestros “enemigos”.

Enemigos? Porque?

Talvez porque piensan y sienten diferente a nosotros? O porque su manera de actuar no nos gusta?

En realidad eso no debería ser importante para nosotros, lo importante para nosotros y para que nuestro corazón esté en paz es que hacemos con eso.

Ese “enemigo” en general, es un pobre tipo (hombre o mujer) que vive en una maraña de odios y rencores de su pasado y que no sabe resolver y le impide ser feliz por si mismo y considera todos sus actos en la vida como una guerra contra los demás.

El pobre ve en los otros un desafío, ve en los otros como seres que sólo buscan tomar lo que cree le pertenece… y nada nos pertenece realmente… todo nos fue concedido en base al amor que hemos puesto en ello… no en base a lo que conseguimos apretando los dientes y puños…. Eso se pierde…. Tarde o temprano…. Cuanto más cerramos el puño menos lugar tenemos en nuestra palma para recibir…

Por eso, quienes añoramos recibir, tenemos que abrir nuestras manos y el corazón y serán llenadas con un sin fin de cosas...

La vida es una lucha, SI. Pero no una lucha con los otros a ver quien la tiene más grande (como lo canta Serrat) sino es una lucha con nosotros mismos de cómo aprendemos a abrirnos a todos a través del amor, de las buenas intenciones, es una lucha para aprender a tender nuestras manos a favor de todos.

La vida es una lucha, es aprender a ser en el todo, es decir es aprender a que aprendiendo a SER podemos formar parte del TODO.

La vida es aprender a ser que somos UNICOS y sólo eso es lo que nos une a todo lo que nos rodea y formamos el TODO que nos da nuestro lugar.

Sólo en ese momento la Armonía se hace presente encontramos la Paz, encontramos Placer en cada cosa que hacemos y se nos presenta.

Es habitual encontrar placer en los que nos dan, menos habitual es cuando damos a otros… porque tenemos la tendencia a agradecer lo que nos dan y no hemos sentido la emoción de dar sin esperar nada a cambio.

Si lo experimentas, seguramente encontrarás una nueva manera de sentir.

La vida no es MIO MIO MIO…. Si aprendemos a soltar…. Nuestro pecho se incha de un millón de nuevas sensaciones placenteras que nos dibujan una sonrisa permanente.

Se feliz… Suelta… perdona… deja de encarar la vida como si fuese GANAR o PERDER…. Si aprendes …. No es posible perder.


El premio no es recibir, el premio es DAR.

Si alguna vez DAS de corazón y sin esperar algo a cambio, entonces comenzarás a sentir el verdadero placer de haber dejado entrar la felicidad a tu vida.... y a tu corazón, en donde encontrará un nido muy cálido donde estar.

No hay comentarios: