De perros y gatas….

Perros… son todos iguales! Ladran, gruñen, muestran los dientes, andan en 4 patas, cola, entierran huesos cada vez que pueden y son fieles al amo.

Los gatos… también son todos iguales! Maúllan, ronronean, sacan sus uñas, andan en 4 patas, cola, y juegan con un ovillo de lana y tienen ese no se que los hace sean absolutamente independientes de uno, son como… desconfiados diría yo.

Diferentes e iguales al mismo tiempo… pueden pasar toda la vida peleándose y disputando un territorio, la preponderancia de uno sobre el otro.

Y los hombres y las mujeres? ¿Qué?

Mirando el comportamiento de perros y gatos, ¿podríamos analizarlo desde el mismo costado?

Claro que si! Teniendo en cuenta ciertas diferencias.

Diría que los hombres son perros y las mujeres, gatos.

También podría indicar que los humanos son algo más “inteligentes” y que tienen el libre albedrío, la posibilidad de poder elegir.

Después de mirar y entender el comportamiento perruno y gatuno, podemos analizar y comparar el propio y llevarlo a nuestra relación con los otros.

Estoy convencido que muchos aspectos interesantes podemos encontrar y, siguiendo la intuición ir corrigiendo y mejorando los aspectos relacionales con la gente que nos rodea, sea en el trabajo, los amigos, la familia y nuestra pareja, pero por sobre todo con nosotros mismos ya que si allí estamos bien… todo lo demás se mejora más simplemente.

O acaso no nos enojamos con los demás cuando no encontramos la manera de cambiar una realidad que no nos gusta…?

No te pasó de sentir profundo enojo y dirigirlo a quien tienes al lado?... no reflexionaste después y te diste cuenta que el otro ninguna culpa tenía para tu enojo y lo que provoco tu enojo era algo tuyo contigo mismo y tu reacción sólo hizo deteriorar la relación.

Perros y gatos… Mujeres y hombres… tan iguales y tan diferentes… pero la misma cosa… se necesitan para crecer y poder vivir lo que son.

Yo he andado “gateando”, en el buen sentido, y he encontrado cierta desconfianza…y en algún caso hasta agresión... y por eso me pregunto…

¿Cómo es posible vivir sin confiar en el otro.... o agrediendoló?

Y me respondo… “Vivo como puedo, y justamente confiar no puedo porque me traicionaron muchas veces”… y por eso es que no me permito seguir viviendo… aunque frente a mi esté esa persona en quien puedo si descansar mi ser y encontrar la totalidad.

Y así andamos por la vida, viviendo a medias… sin poder dejar atrás lo que nos lastimó y sin darnos otra oportunidad.

Tanto valor le damos a quien nos lastimó?

Tan poco valor nos damos a nosotros mismos?

Que vale más?

Un pasado… que no podemos modificar o un presente sin límite?

Y algo que no tenemos que olvidar…

“El presente es eso que pasa mientras planificamos nuestro futuro” John Lennon

Y si dejamos pasar al presente, no habremos vivido.